Pablo Téllez López es un chico sevillano de 21 años que está estudiando cuarto y ultimo año de universidad del grado de Matemática Aplicada. Entre agosto y diciembre de 2023, su primer cuatrimestre de cuarto curso, hizo un programa de intercambio en Creighton University (Omaha, Nebraska, Estados Unidos). Después de las navidades, comenzó una experiencia de prácticas en la empresa cervecera AB InBevy en Praga. En estos meses está trabajando como Analista de Datos en el equipo de Business Intelligence del departamento de Logistics de la empresa.
PREGUNTA (P): ¿Por qué elegiste la Universidad Loyola? ¿Que grado estás estudiando?
RESPUESTA (R): Estudio el Grado de Matemática Aplicada en Loyola Sevilla. Elegí la Universidad Loyola por el enfoque internacional y el objetivo de convertir al estudiante en el profesional que demanda el mercado laboral mediante profesores, contenidos novedosos y servicios actualizados a todo lo que pasa en el presente y pasará en el futuro, aunque también me atrajo su oferta de actividades más allá de las clases y su campus.
(P): ¿Qué habilidades crees que has desarrollado durante tu carrera de grado? ¿Crees que ha sido fundamental en tu aprendizaje?
(R): Más allá de las capacidades técnicas que se le presuponen a un egresado en Matemática Aplicada como análisis de datos, resolución de problemas, pensamiento crítico, programación y modelado matemático. La carrera en Loyola me ha ayudado a desarrollar otras soft skills como capacidad de trabajo en equipo, comunicación efectiva y capacidad de liderar y gestionar proyectos que después he tenido que utilizar en mis prácticas o incluso en mi día a día.
(P): ¿Qué oportunidades has tenido hoy gracias a Loyola? ¿Que tienes ahora que antes no tenías?
(R): Las dos oportunidades más evidentes son la posibilidad de haber podido cursar un cuatrimestre de mis estudios en Estados Unidos y la posibilidad de poder irme al extranjero a hacer mis prácticas curriculares. Aunque también he tenido la oportunidad de conocer gente nueva, disfrutar de su servicio de deportes y empezar a pensar que personal y profesional quiero ser en el futuro. Desde luego hoy en día tengo nuevos amigos que antes no conocía y las ideas más claras de que quiero hacer en el futuro.
(P): ¿Piensas que la Universidad marca la diferencia? Cuéntanos tu trayectoria.
(R): La personalidad de una persona la marca lo que le rodea y entre esas cosas está la universidad. Los profesores, los compañeros, los contenidos, todo en general te va moldeando, aunque no te des cuenta. Mi trayectoria se puede definir como ambición y curiosidad.
(P): ¿Cómo valoras tu experiencia en el extranjero?
(R): Ambas experiencias están siendo muy rompedoras porque me han hecho salir de mis zonas de confort. De vivir durante toda mi vida en casa a de mis padres a vivir en países nuevos y totalmente diferentes. Estados Unidos fue un auténtico sueño, fue ver y vivir las películas que llevas viendo toda la vida y vivir una experiencia 100% universitaria aparte de conocer personas que me han marcado y me llevaré conmigo toda la vida, más.
Después Praga es totalmente diferente a lo que estaba acostumbrado en España y en Estados Unidos, es un estilo de vida diferente con un trabajo, llegas solo a una ciudad que no conoces y donde algunos siquiera hablan inglés.
(P): ¿Recomendarías tu experiencia Erasmus?
(R): Siempre recomiendo a la gente que se vaya fuera, creo que es imprescindible para formarte personal y profesionalmente salir de tu zona de confort, te cambia la forma de ver las cosas y conoces otros puntos de vista que quizás antes ni te habías planteado. El sitio es lo de menos, sobre todo porque depende de la persona, aunque yo siempre digo que, con una actitud positiva, el sitio en el que estés te parece tu sitio ideal.
(P): ¿Qué consejos le darías a alguien que está a punto de comenzar un grado en Loyola o aquellas personas que se sienten perdidas y tienen la oportunidad de estudiar una carrera?
(R): A la persona que empieza en Loyola le recomendaría que se empapé, que escuche y que tenga muchas ganas de aprender, que aprovechase todas las oportunidades que aparezcan, que sea consciente de que no todos tienen la oportunidad de la que disfrutará y que disfrute del camino, eso es lo más importante y, a veces, con tantas cosas se nos olvida.
