El acto ha dado comienzo con una presentación por el profesor Ángel Viñas, dando las gracias a los asistentes y poniendo de manifiesto la necesidad de dar su lugar a una profesora que fue y estuvo en todo momento volcada por la enseñanza universitaria y que nos dejó el pasado 8 de julio. Un homenaje creado con todo el cariño para una profesora que ha dejado una huella imborrable en la Universidad Loyola.
Fabio Gómez-Estern, rector de la Universidad Loyola ha iniciado el acto poniendo en pie la vida y trayectoria de Pilar. Se ha querido detener en su pasión y dedicación en el estudio del humanismo teología y filosofía, así como en su disponibilidad de asumir todos los retos y objetivos que le llegaban. Cultivó un ambiente donde la curiosidad florecía, con pasión en la enseñanza, “hoy recordamos a una brillante académica y a una guía maravillosa para sus estudiantes”.
“Su legado perdurará en la memoria y en el corazón de aquellos que estuvieron con ella, pilar seguirá viva”
El rector ha concluido con el compromiso de querer continuar su obra y ha incidido en que ahora los docentes tienen la misión de seguir con la verdad de la obra de Pilar.
Cada uno de los asistentes tienen una imagen de Pilar, por ello este homenaje continúa con una semblanza personal y académica de la profesora, en primer lugar, en manos del profesor Pablo Pérez Espigares, que lleno de emoción ha dado las gracias a los amigos y familiares de Pilar Pena. Para él compartir asignatura con la académica, hizo que cambiase su vida. Tuvo que convivir mucho con ella, ver cómo daba clases era un auténtico acontecimiento. Pilar amaba su profesión y amaba lo que enseñaba, y ella lo ponía de manifiesto, lo trasladaba a sus alumnos y a cada una de las personas que la conoció.
“Fue una mujer de palabra por la fuerza de su discurso y por el valor de las humanidades”
La Universidad Loyola Andalucía debe de sentirse honrada de haber estado en su plantilla, “Pilar era buena profesora porque no paraba de aprender”, la ignorancia es muy atrevida, añade Pablo a su discurso. Exponía sus conocimientos a sus compañeros de forma generosa y contribuyo a dar forma a cada artículo y cada proyecto que llegaba a sus manos. El profesor afirma que se ha quedado un vacío inmenso en el departamento, “la echamos mucho de menos, cada día que vengo a la facultad”, ella hacia del lugar de trabajo un espacio más agradable y humano. Hoy, Pablo Pérez, muy emocionado, quiere recordarla como mujer de palabra por todo lo bueno y por todo lo que ha dejado como legado, “me hubiera gustado ser su amigo de juventud, deja un hueco imposible de llenar, como profesora del departamento y cómo amiga”. Pablo Pérez ha comentado varias frases de Adolfo Hamer, también profesor de la Universidad, que no ha podido asistir pero que si ha querido ser parte de este homenaje.
El acto ha continuado con una pieza musical para reseñar la obra y vida de la reciente desaparecida profesora. Las piezas musicales han sido “O Sacred Head, Now Wounded” de Hans Leo Hassier.
A continuación, ha tomado la palabra el profesor e investigador Jesús Mª Nieto, perteneciente a la Universidad de Valladolid, que ha comentado las aportaciones de Pilar Pena en el ámbito de la Filosofía y la Teología, una persona muy cercana a ella por trabajos y proyectos en común. El académico ha empezado queriendo recordar la figura de Pilar. Ha reseñado su trayectoria y todo lo que aprendió gracias a ella. Dos tesis realizó a lo largo de su vida, en torno al humanismo, la filosofía, el pensamiento político y la teología. Una trayectoria excelente y exquisita que ha dejado la profesora como legado.
En otra instancia, Ingrid Gijón, responsable de publicaciones y archivo de la Universidad Loyola, ha explicado como ha sido Pilar Pena al frente del Archivo Teológico Granadido. También emocionada, ha recordado cómo conoció a la profesora, su encuentro fue puramente laboral. A pesar de todos los retos que ha tenido, supo coger el cargo y ser pionera en asumirlo, y de muy buena manera. Pilar Pena, además de académica, fue directora de la revista Archivo Teológico Granadino, siempre queriendo ser mejor, que la revista lo fuese y siempre queriendo que la entrevista estuviera visibilizada y posicionada.
“La teología y la filosofía deberían de ir de la mano”
Más allá de los logros tangibles, hay un trasfondo de la calidad humana de Pilar, una persona que ayudaba a los demás y se preocupaba por ellos, muy empática y servicial a todo el que lo necesitaba, convirtiéndose para Ingrid en compañera y amiga.
Antes de finalizar, se ha tocado otra pieza musical, “Si dolce il tormento”, de Claudio Monteverdi. Posterior a ello, la clausura del acto institucional ha sido por parte del profesor Ignacio Sepúlveda, director del Departamento de Humanidades y Filosofía de la Universidad Loyola, que ha sido uno de los impulsores del acto y por querer recordarla como ella se merece. La menciona con cariño, con una sonrisa, con su humor y con todo lo bueno y la positividad que le rodeaba.
"Lo fundamental en la mísitica es la experiencia del amor, sin la experiencia del amor el resto no tendría sentido"
Para clausurar ha sonado la pieza Gaudeamus Igitur y se ha dado el cierre del acto con una eucaristía, presidida por los PP. José María Valverde y José Ignacio Vitón, en la capilla de la Universidad del Campus de Sevilla en memoria de Pilar Pena.
