Un total de 40 profesionales han comenzado hoy una nueva etapa como participantes de la segunda edición del Diploma de Especialización en Reestructuración y Refinanciación de Empresas de Loyola Executive, la escuela de negocios de la Universidad Loyola.
En esta ocasión, el número de inscritos ha sido un 25% mayor que en la primera edición, por lo que demuestra el claro interés de los profesionales de los sectores jurídico y económicos por la formación de calidad que imparte Loyola Executive.
Durante el acto de apertura del diploma, su director Eduardo Gómez, ha manifestado que hay una innegable apuesta por las instituciones comunitarias por cambiar la dinámica y dirigirse hacia la prevención, por ello, es fundamental para los profesionales de este sector actualizar sus conocimientos en las reformas que se plantean en nuestro derecho concursal”.
En la inauguración también ha estado presente Jesús Borjabad, presidente de la Asociación de Administradores Concursales APACSA, quien “agradeciendo a la dirección de Loyola Executive por su implicación en crear de cero un programa executive, completamente práctico y adaptado a las necesidades reales de los profesionales en derecho concursal”, así como Marta Pérez, directora de Loyola Másteres, y Miriam Ramos, program Manager de Loyola Executive. El programa cuenta con el patrocinio de Hermes Capital, Activos Concursales y Esemar.
El programa está dirigido a profesionales especialistas en derecho concursal, en cualquier de sus ámbitos, que quiera actualizar sus conocimientos a raíz de la reforma planteada por la Directiva (UE) 2019/1023 del Parlamento Europeo y del Consejo sobre reestructuración preventiva, exoneración de deudas e inhabilitaciones, y sobre medidas para aumentar la eficiencia de los procedimientos de reestructuración, insolvencia y exoneración de deudas. También, se orienta a la todos aquellos profesionales que deseen trabajar como expertos en reestructuraciones.
El objetivo de este diploma es que los participantes estén preparados para abordar los cambios que la Directiva europea introducirá en el derecho concursal y preconcursal español en los próximos meses. “Es para nosotros un reto daros esta formación, con el objetivo de que trabajéis y ayudéis a las empresas en su camino hacia la solvencia económica”, ha explicado la directora de Loyola Másteres.
Las profundas reformas que la Directica (UE) 2019/1023 introduce en el derecho concursal español demandan una actualización de sus profesionales en activo
Durante el acto de apertura del curso, se ha celebrado una mesa redonda con dos expertas de primer nivel, Nuria Bermejo, profesora titular de Derecho Mercantil de la Universidad Autónoma de Barcelona; y Antonia Magdaleno, abogada y socia-directora del Despacho Antonia Magdaleno Abogados y Economista.
El objetivo de esta mesa redonda ha sido realizar un recorrido general por los puntos más importantes de la Directiva 2019/1023 en materia de reestructuración preventiva, así como de la forma en que dichas materias han sido introducidas por el legislador español en el Proyecto de Ley de Reforma del texto refundido de la Ley Concursal (TRLC) vigente. La transposición de la Directiva 2019/1023 tiene como límite el próximo 16 de julio de 2022, por lo que el proyecto de reforma tendrá que estar aprobado y en vigor en dicha fecha.
“Esta reforma de nuestro derecho concursal y preconcursal es, probablemente, la más importantes de las múltiples que ha ido sufriendo la Ley Concursal de 2004”.
La abogada ha explicado, durante su intervención, los tres puntos clave de la directiva: “la necesidad de contar con medios de reestructuración temprana de la empresa viable; la posibilidad de una completa exoneración de las deudas de las personas deudoras de buena fe; y la necesidad de aumentar la eficiencia y agilidad de los procedimientos de reestructuración, insolvencia y exoneración de deudas”.
Los participantes del Diploma de Especialización en Reestructuración y Refinanciación de Empresas de Loyola Executive se formarán en los nuevos planes de reestructuración, que sustituyen los acuerdos de refinanciación y a los acuerdos extrajudiciales de pagos, dirigidos a evitar la insolvencia y a mantener la continuidad de la actividad productiva.
“Todo este procedimiento se introduce para aportar agilidad y rapidez al concurso y a la liquidación; favorecer la segunda oportunidad, intentando que las personas físicas insolventes tengan acceso a la exoneración de sus deudas; y simplificar el procedimiento a las microempresas, reduciendo los costes para el deudor”, ha finalizado Antonia.
