Hoy, investigadores y profesores de la Escuela de Doctorado, el Departamento de Humanidades y Filosofía y el Grupo de Trabajo Laudato Si de la Comisión de Desarrollo de la Universidad Loyola han debatido sobre el desafío ético de la interdisciplinariedad.
La mesa redonda ha sido inaugurada y ha estado moderada por Ángel Viñas, profesor del Departamento de Humanidades y Filosofía. “En las universidades de la compañía existe un marco general que da sentido y orientación a las actividades académica que se hacen en la universidad y se enfocan en cuatro palabras: humanitas, iustita, la fides y la utilitas. En ese marco planteamos el desafío ético de la interdisciplinariedad”.
La jornada, que ha reunido a estudiantes de grado, máster y doctorado de la Universidad Loyola, ha estado centrada en discernir cuáles son los límites que tienen las distintas disciplinas científicas en cuanto a la ética se refiere y qué caminos están tomando los investigadores para superarlos.
Para Carlos Ortiz, profesor en el departamento de ingeniería de la Universidad Loyola y uno de los científicos más influyentes del mundo según el Ranking of the World Scientis: World’s Top 2% Scientists, considera que la ingeniería es una disciplina enfocada en la aplicación práctica del saber científico para resolver problemas concretos. Sin embargo, “los ingenieros tendemos a la cuantificación que puede hacer que otros aspectos humanistas y éticos, difícilmente cuantificables, queden apartados”.
Por su parte, como psicólogo y profesor titular en el Departamento de Psicología de la Universidad Loyola, Marco Gemignani lamenta que han perdido de vista los valores éticos ya que la psicología se está convirtiendo en una disciplina muy técnica. “Es necesario pensar en líneas generales qué estamos haciendo, cómo lo hacemos y cómo afecta a la sociedad”.
Clase abarrotada por estudiantes de grado, mástr y doctorado para escuchar a los investigadores.
Eduardo Ibáñez, profesor del Departamento de Humanidades y Filosofía y experto en derechos humanos en sus oportunidades y retos actuales considera que “tenemos una misión, la transformación social a través de las funciones universitarias. Como límites los encontramos en la posición y análisis, que tiene que actualizarse con el conocimiento vigente”.
La ciencia y los datos, cada vez más cercana a los problemas sociales
Pilar Tirado, catedrática del departamento de Economía Financiera y Contabilidad de la Universidad Loyola Andalucía, y Enrique Mesa, también profesor de este departamento, coinciden en el cambio de paradigma de la contabilidad tradicional hacia una más social. “La contabilidad actual es más multistakeholders. No solo piensa en los intereses de los acciones y mercados, sino que está más pensada para la ciudadanía, cobra importancia lo intangible, es más subjetiva, holística y mira al mundo”, especifica Tirado.
Enrique reconoce que el 90% de los planes docentes se centran en contabilidad financiera y el 70% de las personas que se gradúan en esta disciplina se dedicarán a ello. Sin embargo, la contabilidad tradicional está dando pie a la contabilidad social y el reporting no financiero. “Quiero explicar cómo la contabilidad puede aportar a la comprensión de la realidad. Tiene un papel de definición de la realidad”.
Para concluir, Ángel Viñas pregunta a los investigadores sobre los cruces entre disciplinas y sus ventajas. El profesor de psicología aclara que “la interseccionalidad y la interdisciplinaridad son fundamentales en el ámbito científico e investigador. No somos individuos de variables discretas, sino un conjunto global que forman un todo. El gran reto es salir del individualismo y buscar la interacción”.
Carlos Ortiz concluye que los grandes retos de la humanidad son retos interdisciplinares. “Yo me centro únicamente en la energía, pero el cambio climático requiere un conocimiento holístico. Coincidí en Centro América con Marco, quien investigaba el cambio climático sobre cómo afectaba a las migraciones”.
