Recientemente la Universidad Loyola firmó un convenio con la Federación de Asociaciones del Corazón de Sevilla y Provincia (CARDIOSEVILLA).
El acuerdo se estableció con el fin de realizar distintas acciones de colaboración como el apoyo a la formación de estudiantes de ciencias de la salud y de otras titulaciones, para lo cual la presidenta de la asociación Margarita Reina Sánchez, ha celebrado una reunión con los decanos de las facultades de Psicología y Educación, Ciencias de la Salud y Comunicación y Artes con el fin de explorar vías de colaboración entre la federación de pacientes cardiacos y los alumnos de las titulaciones afines a este ámbito, así como con investigadores de estas mismas áreas.
La Federación de Asociaciones del Corazón de Sevilla y Provincia (CARDIOSEVILLA) está constituida por pacientes cardíacos, y está dedicada a la continuidad de cuidados y mantenimiento de hábitos saludables tanto para los miembros de las asociaciones, como para su entorno. Uno de los objetivos de este acuerdo fue poner a disposición de este fin los recursos humanos y medios materiales necesarios para llevar a cabo las acciones necesarias para beneficiar a los colectivos implicados.
Una de las acciones que llevan a cabo es la formación de voluntarios que se encargan de visitar a pacientes cardiacos en hospitales o que se encuentran en un periodo difícil de la patología. Ha sido en este sentido en el que la investigadora experta en psicología de la salud, Davinia Resurrección, ha ofrecido a dichos voluntarios un taller titulado “Cómo ser voluntario en rehabilitación cardiaca”.
La experta en psicología de la salud realizó una labor de motivación a los voluntarios y que su labor sea reconocida, una de las prioridades de la federación, así como la de extender convenios con universidades, hospitales y otras entidades sociales para conseguir un mayor apoyo a las enfermedades cardiovasculares, que constituyen la primera causa de muerte.
La profesora y experta de la Universidad Loyola dio pautas a los voluntarios de cómo establecer el acercamiento para hablar con los enfermos, estrategias para comprender y apoyar de la mejor manera a los pacientes y trabajar relaciones afectivas, trabajo constructivo y conductas verbales y no verbales. Finalmente realizaron dinámicas de apoyo e intercambiaron experiencias y testimonios.
La investigadora fue la primera en defender su tesis en la Universidad Loyola el pasado año 2018. El trabajo titulado “rehabilitación cardiaca en la mujer” exploraba las diferencias de género en la escasez de tratamiento emocional de estas enfermedades, y establecía la razón en que la mujer al ser el centro de los cuidados y al estar dentro de una población más vulnerable tenían una menor asistencia a los programas de rehabilitación cardiaca.
