Elegir un máster es una decisión clave en el camino hacia el ejercicio profesional, especialmente en el ámbito jurídico. En el caso de Carlos Cordero, alumno del Doble Máster Universitario en Abogacía y Procura + Máster Universitario en Tributación y Asesoría Fiscal de la Universidad Loyola, esa elección ha marcado un antes y un después en su formación.
De la teoría a la práctica: un salto real hacia el mundo profesional
“Decidí estudiar este máster porque quería algo más práctico”, comenta Carlos. Después de completar su grado en Derecho, sentía la necesidad de una formación que no solo reforzara lo aprendido, sino que le preparara de verdad para enfrentarse al mundo profesional.
La conexión entre la Universidad Loyola y el mercado laboral es, precisamente, uno de los valores diferenciales que más destaca: el enfoque práctico, cercano al ejercicio real de la profesión jurídica y tributaria.
“La carrera te da la base, pero el máster te conecta directamente con la realidad del día a día en despachos o empresas”.
Si hay algo que Carlos subraya con entusiasmo es la calidad del profesorado: “Lo que más destaco, sin duda, son los profesores. Tenemos profesionales con años de experiencia en despachos, que te dan consejos tanto profesionales como personales. Y eso no tiene precio”. La convivencia en el aula con abogados en ejercicio, expertos de la administración pública y docentes universitarios consolidados proporciona una visión completa y plural del sector legal. Esa diversidad permite al alumno no solo aprender normas o procedimientos, sino adquirir criterio, perspectiva y habilidades blandas necesarias para su futuro.
Una especialización con valor añadido
Carlos no duda en afirmar que especializarse ha sido una de las mejores decisiones de su vida académica. “El máster en abogacía es habilitante, sí, pero si tienes claro qué área te apasiona, como en mi caso el derecho fiscal, la especialización es fundamental. No lo haría de otra forma”.
Para él, el valor añadido de combinar ambos másteres es incuestionable. No solo se adquieren las competencias generales para ejercer la abogacía, sino también una formación profunda y técnica en una rama clave como la tributación y la asesoría fiscal, con gran demanda en el mercado laboral.
Además del enfoque práctico en el aula, Carlos valora mucho la facilitación de acceso al entorno profesional que ofrece la Universidad Loyola. “Aquí te presentan a los despachos, organizan visitas, te acercan a la realidad del sector al que quieres entrar. Eso marca la diferencia”.
Con testimonios como el de Carlos, queda claro que el Doble Máster Universitario en Abogacía y Procura + Máster Universitario en Tributación y Asesoría Fiscal de la Universidad Loyola no solo forma profesionales técnicamente competentes, sino también personas con visión, criterio y valores, preparadas para ejercer con rigor, ética y compromiso.